Comisiones Obreras de Madrid | 28 marzo 2024.

CCOO ha denunciado ante Trabajo la situación del CEIP Miguel de Cervantes (Getafe) por los problemas derivados de la construcción por fases

    La política de construcción por fases de los centros educativos públicos que practica la Comunidad de Madrid no es solo nociva para la comunidad educativa en general, sino también para las condiciones de trabajo del profesorado. CCOO ha denunciado ante la Inspección de Trabajo el caso del CEIP Miguel de Cervantes de Getafe.

    24/05/2018.
    Imagen del centro

    Imagen del centro

    La construcción por fases en los colegios de la Comunidad de Madrid preocupa a la comunidad educativa, no solo por el incumplimiento del Real Decreto 132/2010, de 12 de febrero, por el que se establecen los requisitos mínimos de los centros que impartan las enseñanzas del segundo ciclo de la educación Infantil, la educación Primaria y la educación Secundaria, sino también porque la limitación de espacios favorece la aparición de riesgos que ponen en peligro la seguridad y salud de la comunidad educativa. Esto es así porque este tipo de construcción impide que se puedan aplicar algunas de las medidas necesarias para evitar o minimizar estos riesgos que, junto con la proximidad de las obras de las siguientes fases, generan a su vez nuevos riesgos en los centros educativos.

    La construcción por fases pone en grave riesgo la salud de los trabajadores/as y del alumnado. En el caso del CEIP Miguel de Cervantes de Getafe esto sucede, entre otras cosas, porque la falta de espacios provoca masificación. El centro solo dispone de nueve aulas para trece grupos, lo cual hace que cuatro de estos grupos de 3 años deban trasladarse en autobuses diariamente a otro centro público de la localidad acompañados de sus respectivos profesores y profesoras.

    El CEIP Miguel de Cervantes tampoco dispone de espacios comunes u otros destinados a realizar tareas docentes que no sean impartir clase. No hay sala de profesores, solo un despacho que comparte el equipo directivo para tareas de administración y gestión. Tampoco dispone de aulas para realizar desdobles y refuerzos, ni gimnasio, ni aula de música, biblioteca, o sala específica para comedor – el servicio de comedor en dos turnos se realiza en la sala previamente planificada para uso polivalente. El patio tampoco cumple las dimensiones mínimas reguladas para un centro de infantil y primaria. El vestíbulo principal se encuentra habilitado con mesas y sillas para impartir clases de religión y música incumpliendo todas las medidas de protección contra el ruido, además de ser un espacio de paso de profesorado, familias y proveedores. Es más, uno de los pasillos principales que da paso a zonas de evacuación, se encuentra obstaculizado por mobiliario escolar al no haber otro espacio para ubicarlo. En una de estas mesas atiende la orientadora del centro al alumnado que requiere atención educativa específica y también se realizan actividades educativas de apoyo y de refuerzo debido a la falta de aulas.

    En la actualidad se está construyendo la segunda fase utilizando una toma de luz del colegio para la obra, sacando para ello un cable por la puerta de salida de emergencia. El cable atraviesa una zona de tránsito constante del alumnado, profesorado, familias, incluso distribuidores de alimentos y servicio de catering para el servicio de comedor.

    Ante la evidencia del incumplimiento por parte de la Comunidad de Madrid de las mínimas condiciones para la realización de las tareas educativas, CCOO ha trasladado todas estas irregularidades a la Inspección de Trabajo para que actúe en consecuencia. Para CCOO, derecho a la educación significa garantizar la seguridad de los y las trabajadoras, del alumnado y sus familias.