Comisiones Obreras de Madrid | 19 marzo 2024.

Vida y trabajo en un mundo digitalizado

    Con este título, CCOO Madrid ha celebrado hoy una jornada en la que la que se han abordado cuestiones relacionadas con la evolución tecnológica y sus consecuencias para el mercado laboral.

    09/10/2019.
    Vida y trabajo en un mundo digitalizado

    Vida y trabajo en un mundo digitalizado

    La inauguración de la jornada -organizada por las secretarías de Acción Sindical y de Políticas Sectoriales y Desarrollo Territorial- corrió a cargo del secretario general de CCOO Madrid, Jaime Cedrún, que insistió en profundizar en todas estas cuestiones para “no dejar a nadie atrás” y situar en la agenda sindical, política, económica y social los problemas derivados de la digitalización en el mundo del trabajo.

    La vida digitalizada

    La primera de las mesas –moderada por el secretario de Políticas Sectoriales y Desarrollo Territorial, Juan Carlos García- estuvo dedicada a la “vida digitalizada”. El presidente de la Fundación España Digital, Fernando Davara, abrió los turnos con una crítica a la “frivolización” del uso de la tecnología que se da en la sociedad, exigió una mayor responsabilidad y recomendó “considerarnos actores” de estos procesos de cambio “o estaremos excluidos”.

    Por su parte, el director gerente de la Real Academia de Ingeniería de España, Javier Pérez, aludió a los esfuerzos que realizamos por digitalizarnos y lamentó que no estuvieran centrados en el trabajador. Al respecto, coincidió en pedir responsabilidad a todas las personas que “tenemos que soportar este tsunami” de la digitalización. Pérez expresó su preocupación por el uso de la tecnología y el control al que estamos sometidos a través de los sensores y de los algoritmos que se generan, cuyo objetivo debería contribuir a regular las relaciones laborales en un escenario en el que los individuos son los principales generadores de datos. A su juicio, la tecnología debería emplearse como un “generador de igualdades”.

    La mesa finalizó con la participación del director del Instituto Cuatrecasas de Estrategia Legal en RRHH, Guillermo Tena, que desarrolló su intervención en torno a la presencia continuada de la tecnología en la vida diaria de cualquier persona y al carácter “universal” de la transformación que estamos experimentando y de la “convergencia digital”.

    La economía digitalizada

    La segunda mesa de la jornada –moderada por la secretaria de Organización, Paloma Vega- giró en torno a los cambios producidos en el mundo laboral por el proceso de digitalización. El responsable de Análisis de Políticas Públicas en el Observatorio Nacional de las Telecomunicaciones y la Sociedad de la Información, Juan Miguel Márquez, explicó en su discurso la relación entre ambas esferas, la del mundo del trabajo y la de la digitalización, y la manera en la que el impacto de la tecnología en este ámbito primero “destruye”, luego “crea” y después “transforma”. A lo largo de su ponencia, Márquez analizó la situación de los empleos “en riesgo de automatización y destrucción”, así como también el impacto “desigual” de la tecnología que existe tanto entre diferentes países como en el interior de cada uno de ellos. En este sentido, subrayó la importancia de la formación continua para hacer frente a estos procesos de cambio.

    Posteriormente, la consejera de la Oficina de la OIT para España, Judith Carreras, abordó en su turno la importancia de otra transición que discurre paralela a la tecnológica, la transición energética, e indicó también la necesidad de “integrar la dimensión de los límites” en cuanto al empleo de los recursos energéticos. Carreras, que recordó la conmemoración del centenario de la OIT durante este año 2019, explicó que en los procesos de innovación siempre hay una primera fase en la que se destruye empleo y se da una cierta ansiedad tecnológica. Además, aludió al papel de las instituciones del mercado laboral y cuestionó sobre cuál será el rol que jugará el diálogo social, la negociación colectiva o incluso el derecho al trabajo tras la consumación de esos procesos y transiciones tecnológicas y energéticas.

    Finalmente, el coordinador del Gabinete Jurídico Interfederal de CCOO, Enrique Lillo, insistió en la importancia de mantener el ámbito de la regulación ante este proceso de digitalización, en referencia a la ley o a los convenios. En una situación de “emergencia social” es necesaria una legislación laboral “dura”, en contraposición a una “flexibilidad” que suele ser negativa para los trabajadores y trabajadoras. Lillo señaló que en la actualidad existe una “tentación muy fuerte” para prescindir de la negociación colectiva y en caminar hacia la “individualización de las relaciones laborales”. A su juicio, la “máxima aspiración del empresario siempre es la de ganar dinero” y no tener más responsabilidades con respecto sus plantillas.

    Herramientas de trabajo para la digitalización

    La tercera y última mesa de la jornada –moderada por la secretaria de Acción Sindical, Asunción Servant- tuvo como protagonistas a los secretarios generales de las federaciones de CCOO Madrid de Servicios, Miguel Periáñez, de Industria, Julián Teso, de Servicios a la Ciudadanía, David Jabato, y a la secretaria confederal de Acción Sindical, Mari Cruz Vicente.

    Periáñez desarrolló su intervención haciendo referencia a la “desestructuración” actual de la clase obrera y a la necesidad de “luchar contra la individualización de las relaciones laborales” como una de las tareas principales para el sindicato. El secretario general de la federación de Servicios explicó la situación del mercado laboral y de las empresas en su federación y como se están produciendo cambios graduales en la adaptación de las empresas en el ámbito de la digitalización. Asimismo, advirtió de la “posible liberalización extrema y absoluta” de todos los servicios y del surgimiento y desarrollo de nuevas organizaciones empresariales dentro de la “mal llamada” economía colaborativa. Para Periáñez, el sindicato debe ocuparse de esas empresas que actúan como “intermediarias capitalistas” y que constantemente “eluden la acción del sindicato”. Finalmente, dedicó parte de su ponencia al comercio electrónico y cómo se están generando nuevas formas de trabajo que llevan aparejadas una mayor flexibilidad.

    El secretario general de la federación de Industria, Julián Teso, dijo con respecto a la digitalización de los procesos productivos que “esta revolución ha venido para quedarse”. A pesar de pronosticar que tras estos procesos “se destruirán puestos de trabajo” por el cierre de muchas empresas como consecuencia de esta transición digital y energética, Teso se mostró optimista porque también se crearán nuevos empleos. En su intervención explicó las medidas llevadas a cabo por su federación para analizar el escenario actual y advertir a aquellas empresas, a sus secciones sindicales y la propia administración de qué hacer para promover la adaptación de aquellas compañías que por tamaño reducido tendrán menos oportunidades de adaptarse. Por último, Teso insistió en la importancia de la “formación continua” de los trabajadores y trabajadoras.

    Por su parte, el secretario de la federación de Servicios a la Ciudadanía, David Jabato, expuso algunos de los efectos de la digitalización y de la inteligencia artificial sobre los servidos públicos y de interés general desde el punto de vista de los “derechos y servicios” para la ciudadanía. Jabato reconoció las dificultades del sindicato para “anticipar los cambios”, debido a que las empresas siempre les han “vedado” sus estrategias, lo que les ha obligado a ir “a rebufo”. Por eso, hizo énfasis en la relevancia de la formación y en la importancia de tener en cuenta los “nuevos escenarios de intervención sindical” que se producirán, y que convivirán con los viejos, unos escenarios “de contingencia” en los que la organización sindical “se movía bien”.

    Por último, la secretaria confederal de Acción Sindical, Maricruz Vicente, hizo referencia a las nuevas realidades del trabajo “que pretenden huir de la regulación”, y a cómo los procesos de digitalización “tienen que ser gobernados con la participación del sindicato”. Ante estas transiciones tecnológicas, Vicente apeló a la necesidad de desarrollar “antenas de prospección” para anticipar los cambios que pretenden hacer las empresas, así como también a la exigencia de ampliar los derechos de información que tienen los trabajadores y trabajadoras en el seno de las empresas. Además, la responsable confederal enunció algunas de las cuestiones más importantes sobre las que debe actuar el sindicato, como la regulación de los algoritmos, la gestión de la edad, y la realización de todas esas actuaciones desde una “óptica inclusiva”.