Comisiones Obreras de Madrid | 19 enero 2025.

La Comunidad de Madrid sigue sin una estrategia específica para las personas con discapacidad, mientras crece el desempleo y el riesgo de exclusión de este colectivo tan vulnerable

  • La Estrategia Madrileña de Atención a Personas con Discapacidad finalizó en 2022 y el Gobierno Regional sigue sin actualizarla

03/12/2024.
Persona invidente con su perro guía

Persona invidente con su perro guía

En el Día Internacional de la Discapacidad, CCOO de Madrid quiere llamar la atención sobre las bajas tasas de empleo de este colectivo, el incremento de la discapacidad adquirida durante la vida laboral y el mayor riesgo de pobreza y exclusión social de las personas con discapacidad. Ante la persistencia de estos problemas, es preciso ampliar y diseñar nuevas políticas públicas.

Desde CCOO de Madrid exigimos al gobierno regional y al Ayuntamiento de Madrid que, de forma urgente y participada, pongan en marcha la nueva Estrategia Madrileña de Atención a las Personas con Discapacidad, sin actualizar desde 2022, y el Plan Estratégico de Atención a la Discapacidad, respectivamente, como herramientas para mejorar la vida de las personas y garantizar la inclusión de la perspectiva de la discapacidad en todas las políticas públicas regionales.

Brecha y propuestas

Según el último informe específico del mercado de trabajo en la Comunidad de Madrid, las personas con discapacidad tienen una tasa de actividad del 43,1 %, casi 40 puntos inferior a las personas sin discapacidad (43,1% vs 81%) y, a diferencia del paro total de la Comunidad que se ha reducido, en este último año el paro de las personas con discapacidad ha aumentado un 0, 6%, y existe una brecha de 10 puntos respecto a las personas sin discapacidad cuando se trata de parados de larga duración ( 50,8 vs 40%).

Con el fin de mejorar las tasas de desempleo en este colectivo, CCOO de Madrid propone: 

-Incrementar las cuotas de reserva en las empresas públicas y privadas. Las autoridades deberían garantizar que las excepciones al cumplimiento de las cuotas de reserva no se convierten en la norma habitual.

-El cupo de reserva del 7% en las ofertas de empleo público tiene que traducirse en un aumento significativo en el número de personas con discapacidad que logran superar las pruebas.

-Los incentivos y ayudas han de enfocarse hacia la integración y mantenimiento de las personas con discapacidad en el empleo ordinario. El objetivo de los Centros Especiales de Empleo debería ser facilitar el tránsito al empleo ordinario y no una fórmula de las empresas para abaratar los costes salariales.

Medidas en el entorno laboral

La discapacidad sobrevenida, o adquirida a lo largo de la edad laboral, está aumentando por el incremento de la edad media de las plantillas. Deben diseñarse medidas, como la adaptación del puesto de trabajo, para evitar que las personas trabajadoras de mayor edad que desarrollan una discapacidad o una enfermedad crónica se vean obligadas a abandonar el mercado laboral antes de su edad legal de jubilación. Según la encuesta de discapacidad del INE (EDAD 2020), un 16% de las personas trabajadoras con discapacidad no ha recibido las adaptaciones que necesitaba en su puesto de trabajo. Entre las personas paradas con discapacidad que han trabajado anteriormente, una de cada cuatro (23%) citan su discapacidad como la principal razón para no encontrar trabajo.

Las personas con discapacidad presentan valores mucho más elevados en todos los indicadores relacionados con el riesgo de pobreza y exclusión social. El 31% están en riesgo de pobreza y/o exclusión social –la llamada tasa AROPE—, 8,3 puntos porcentuales por encima de las personas sin discapacidad. En los tres componentes de la tasa AROPE se observan cifras superiores. Destaca especialmente la tasa de privación material y social severa, que se duplica para las personas con discapacidad con respecto a la población sin discapacidad (13,3% vs 6,2%).