Comisiones Obreras de Madrid | 27 septiembre 2024.

EPA CUARTO TRIMESTRE

Madrid mantiene un mercado de trabajo dual y precario

  • Si bien mejora sus datos de ocupación y reduce el paro

Los datos de paro y ocupación de la EPA del 4º trimestre de 2019 arrojan un descenso del paro y un incremento de la ocupación, pero evidencian que se cronifican problemas como la dificultad de encontrar empleo en las personas paradas de larga duración y la dualidad del mercado de trabajo, con un peso importante de la precariedad.

28/01/2020.
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Madrid mantiene un mercado de trabajo dual y precario

Madrid mantiene un mercado de trabajo dual y precario

El paro ha bajado en Madrid en 2.000 personas en el último trimestre pero en 43.900 en los últimos doce meses, a pesar de que se ha incrementado la tasa de actividad en la región. La tasa de paro se sitúa en 9,99%, un dato todavía peor que en el último trimestre de 2007, cuando Madrid tenía una tasa del 6,4%, que sitúa el número total de personas paradas en 352.300.

En el último año, el paro se ha reducido en 43.900 personas, 26.500 hombres y 17.300 mujeres, lo que supone un incremento de la brecha de género. La tasa de paro entre las mujeres es el 10,6% y entre los hombres es del 9,4%. La principal razón por la que no se evidencia una brecha mayor es la diferencia en tasa de actividad: en el caso de los hombres el 68% trabaja o busca empleo. En las mujeres ese porcentaje baja al 59%.

Por edades, los tramos de edad donde no se ha reducido el desempleo en los últimos doce meses han sido los mayores de 55 años. En el caso de las mujeres, entre 35 y 44 años también ha aumentado el número de desempleadas. Estos datos indican que las personas de mayor edad, cuando se encuentran en situación de desempleo, tienen menos oportunidades. Esta situación se da a una edad más temprana cuando las desempleadas son mujeres.

Aunque las mayores dificultades para salir del desempleo parecen darse en las personas de mayor edad, son las personas jóvenes las que presentan una mayor tasa de desempleo. Entre los 16 y 19 años son muy pocos los incorporados al mundo laboral (12,4%), pero entre los que sí se incorporan a la búsqueda de empleo la tasa de paro es del 48%, una tasa muy elevada aunque supongan un peso pequeño en el mundo laboral. Entre los 20 y los 24 años, con personas que mayoritariamente tienen ya formación para incorporarse al trabajo, la tasa de paro sigue siendo del 26,7%.

En cuanto al tiempo de permanencia en el desempleo, el 43% de las personas en paro llevan en esa situación más de un año. Y casi 30% llevan más de dos años. El paro de larga duración ha bajado entre los hombres en el último año, pero ha subido entre las mujeres, de manera que una de cada tres mujeres en paro lleva en esta situación dos años o más y otro 15,6% lleva más de un año.

El número de hogares madrileños con todos los activos en paro se ha reducido en el último año del 5,7% al 4,47%. También se ha reducido el número de hogares con al menos la mitad de los miembros en paro, que son ahora el 11,68%, mientras que en casi el 85% de los hogares donde viven personas activas no hay ninguna persona en paro.

El número de personas ocupadas en Madrid es de 3.174.500 personas. Se ha incrementado la ocupación en casi 139.000 en un año, la mayoría asalariados, ya que el trabajo por cuenta propia crece más despacio.

En total, las personas asalariadas en Madrid son 2,8 millones, lo que supone un incremento en solo un trimestre de 65.000 personas, de ellas, la mayoría mujeres (54.000), lo que hace que las mujeres trabajadoras por cuenta ajena sean ya el 50,7% de las personas asalariadas. En un año, el incremento de personas asalariadas ha sido de 129.800 y también en este caso el incremento ha sido superior en mujeres (76.900 frente a 52.800 hombres). De los 2,8 millones de trabajadores por cuenta ajena, el 20,1% son temporales, un dato peor que el del trimestre pasado aunque, considerando el conjunto del año, la temporalidad ha bajado medio punto, ya que era el 20,6%. Afecta más a las mujeres (el 21% de las personas que trabajan son temporales) que a los hombres (19,1%).

El hecho de que solo 568.700 empleos de la región (dos de cada diez) sean temporales no indica el grado en que la inestabilidad laboral afecta a las personas trabajadoras madrileñas. El año pasado se firmaron en Madrid 2,8 millones de contratos y de ellos, el 84% fueron temporales, de muy corta duración. Estamos ante una dualidad extrema del mundo laboral, en el que por un lado hay un 80% de trabajadores indefinidos (si se considera la jornada, los indefinidos a jornada completa son ya poco más del 70%). Pero, por otro, hay una elevada rotación de trabajadores y trabajadoras en puestos temporales.

Aunque el sector privado tiene en este momento más trabajadores y trabajadoras por cuenta ajena que antes de la crisis, en el sector público no se da la misma situación, y aunque, en el último trimestre, el número de trabajadores y trabajadoras ha crecido en 14.000 personas en las administraciones y empresas públicas, situándose en 503.000 personas, todavía este sector no ha recuperado la situación previa a los recortes (2010). Para ello son necesarios todavía más de 30.000 empleos públicos.

Junto con la temporalidad, la parcialidad está empeorando las condiciones de trabajo y de vida de las personas trabajadoras, sobre todos las mujeres. El 13,2% de las personas ocupadas (tanto asalariadas como por cuenta propia) son a tiempo parcial. Entre los hombres, la parcialidad es del 6,9%, pero entre las mujeres es casi el triple (19,9%).

Por sectores el de mayor peso en el empleo en la región es el comercio, seguido de servicios auxiliares (jardinería, seguridad) industria, educación y sanidad. Pero los que más crecen en el último año son servicios de arquitectura e ingeniería, informática y telecomunicaciones, transporte y logística y servicios auxiliares (jardinería, seguridad). También crecen la industria, la hostelería, la educación y el sector financiero y de seguros. Mientras que el servicio doméstico ha perdido empleo.

El efecto de la capitalidad hace que algunos sectores económicos concentren en Madrid una parte muy importante del empleo (ingeniería y telecomunicaciones, banca, seguros, servicios de mercado, y, aunque con menos peso los sectores de la cultura o la ciencia), lo que supone una oportunidad de desarrollo para la región.

Por lo tanto, los datos con los que Madrid cierra el año indican que la región reduce el desempleo, pero deja fuera de las oportunidades laborales a personas paradas de larga duración y mayores, sobre todo mujeres. Se recupera el empleo, pero el mercado de trabajo mantiene una alta precariedad que afecta más a las mujeres.

La asignatura pendiente de la Comunidad de Madrid al empezar 2020 es proteger a las personas, de manera especial a las desempleadas de larga duración, luchar contra la precariedad y brecha de género y la rotación en el empleo, y avanzar en la creación de nuevos empleos, apostando por impulsar nuevos sectores