Comisiones Obreras de Madrid | 26 abril 2024.

El suplicio de las víctimas del amianto de Metro de Madrid: Lo que han hecho es de personas malas y rastreras

    28/04/2022.
    Alicia González

    Alicia González

    Con motivo del Día Mundial de la Seguridad y Salud en el Trabajo, CCOO da voz a las víctimas del amianto de Metro de Madrid en un reportaje que publica hoy la revista Madrid Sindical . Enfermos y familias de los fallecidos denuncian el trato degradante al que les somete la compañía en su estrategia de eludir responsabilidades y demorar los procesos judiciales. La secretaria general de CCOO Madrid, Paloma López, pide al Gobierno regional “que actúe de una vez por todas” y reconozca las resoluciones de la Seguridad Social. En la foto Alicia González, hija de Santos González, trabajador de Metro de Madrid fallecido a causa del amianto

    Con motivo del Día Mundial de la Seguridad y Salud en el Trabajo, la secretaria general de CCOO Madrid, Paloma López, ha vuelto a exigir al Gobierno regional “que actúe de una vez por todas” en el caso los trabajadores afectados por la exposición al amianto en Metro de Madrid, que establezca el fondo de compensación y que les reconozca la enfermedad profesional, como ya ha hecho el Instituto de la Seguridad Social (INSS) en el caso de diez empleados fallecidos. Otra decena de enfermos está pendiente de dictamen médico.

    La revista Madrid Sindical publica hoy un reportaje con testimonios desgarradores tanto de enfermos como de familias de trabajadores de Metro de Madrid fallecidos por la exposición al amianto a lo largo de su vida laboral en el suburbano y que muestran su indignación por el trato degradante y difamatorio al que les somete la compañía en su estrategia de eludir responsabilidades y demorar los procesos judiciales.

    “Negligencia, incapacidad y ocultamiento”

    “A mi padre le llevaban los demonios al pensar que había ido a trabajar jugándose la vida. Jamás hubiera asumido ese riesgo”, afirma Alicia, hija de Santos González, mecánico de escaleras que falleció el 24 de enero de 2021. Su caso fue el que dio la voz de alarma cuando en 2016 le diagnosticaron asbestosis, una grave afección pulmonar que solo puede tener un origen: la exposición prolongada al amianto.

    La comisión de de investigación que se abrió en la Asamblea de Madrid concluyó en febrero de 2019 que todas las gerencias de Metro desde hacía al menos dos décadas sabían de la existencia de amianto en sus trenes e instalaciones y de sus riesgos, que lo ocultaron a los trabajadores dejándoles desprotegidos, y que solo les informó cuando la noticia salió a la luz pública. La comisión consideró que hubo “negligencia, incapacidad y ocultamiento”.

    “La empresa nos ocultó que estábamos trabajando expuestos al amianto, manipulándolo incluso, nunca nos formaron ni nos informaron, nunca nos hicieron los reconocimientos médicos específicos que nos tenían que haber hecho”, denuncia Juan Carlos de la Cruz, secretario general de CCOO en Metro Madrid.

    Indecencia y menosprecio

    Los afectados denuncian que la empresa se inventa todo tipo de patrañas para desprestigiar y restar credibilidad a los afectados. Con Jesús Pampín, un jubilado de Metro que padece asbestosis y al que le practicaron una laringectomía total, la compañía ha sobrepasado todos los límites de la indecencia y del menosprecio hacia la dignidad de sus empleados. Dijo de él que tenía cirrosis crónica por alcoholismo. “Se lo inventaron. Una bajeza, una barrabasada. ¿De dónde sacaron esa información? Ni tengo cirrosis ni he tenido jamás problemas con el alcohol. Han mostrado un enorme desprecio por los trabajadores y nos han degradado. Yo lo que quiero es que los responsables respondan por lo que han hecho y nos restituyan el honor”.

    Isidoro Aparicio, que fue jefe de tren, conductor y trabajó en los talleres de Metro, tiene los pulmones dañados por la asbestosis. También se muestra muy indignado por el trato que reciben de quienes les tenían que haber protegido. “Hay una impunidad absoluta. Y luego dicen que la justicia es igual para todos”, se lamenta.

    Ana,hija deCarlos Sánchez, que murió en 2019 a los 64 años, siete meses después de que le detectaran un cáncer de pulmón, resume así lo que Metro hizo pasar a su padre: “Lo que han hecho es de personas rastreras y malas. No tienen un mínimo de decencia. Jamás nos tendieron una mano”.

    Enfermos y familias de los fallecidos aseguran que lucharán en los tribunales hasta el final.

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