Comisiones Obreras de Madrid | 26 abril 2024.

Jornada sobre el impacto del confinamiento por la pandemia en el trabajo doméstico

    CCOO del hábitat Madrid participa en la elaboración y presentación de un estudio sobre el impacto que ha tenido la pandemia en el trabajo doméstico.

    14/06/2022.

    CCOO dentro de sus múltiples actuaciones para la implantación de derechos y reconocimiento del sector de trabajo doméstico participa en Madrid a través de CCOO del Hábitat de Madrid en la “Plataforma por un empleo de hogar y de cuidados con plenos derechos”, que el pasado sábado presentó las conclusiones de un estudio sobre cómo afectó el confinamiento por la pandemia al empleo doméstico.

    En la ponencia Desiré Martínez Pastor, responsable del sector de trabajo doméstico de CCOO del Hábitat de Madrid, presentó los datos arrojados por una encuesta realizada a 151 personas trabajadoras en el sector.

    Durante el confinamiento y los meses posteriores, las condiciones laborales del colectivo se degradaron, aumentado los trastornos psicológicos, el racismo y la vulnerabilidad social. Por el contrario, también crecieron las peticiones de información sobre derechos y contratos por parte de trabajadoras del hogar y empleadores.

    El impacto sobre el empleo en sector del empleo del confinamiento arrojó una pérdida del 25% de los puestos de trabajo en el sector. También un 17% tuvo que quedarse en el domicilio de los empleadores realizando más trabajo y sin ninguna contraprestación económica. Las ayudas que finalmente fueron otorgadas por el Gobierno no pudieron ser tramitadas mayoritariamente al no existir contratos y por lo farragoso de su tramitación.

    Desde el punto de vista la salud laboral, el 24% de las empleadas de hogar afirma haber contraído el coronavirus trabajando. Alarmante es el porcentaje de trabajadoras que dicen haber sufrido amenazas, un 22,5%, así como el lamentable e inadmisible dato para nuestra sociedad de un 12,5% que sufrió agresiones, de las cuales un 9% fueron de carácter sexual.

    Al ser un trabajo con un alto porcentaje no declarado, feminizado y de migrantes, muchas personas se vieron privadas de sus ingresos, sin posibilidad de acceder a los subsidios, perdiendo el empleo o viviendo con sus empleadores, lo que ha conllevado a la aparición de diferentes cuadros psicológicos, como ansiedad y depresión, enmarcadas dentro de la soledad, la frustración y la incertidumbre sobre su realidad presente y futura.

    En las encuestas que han dado origen al estudio también se han muestreado materias como las tareas domésticas que se realizan, las jornadas y descansos, de cara a poder tener un mapa de un sector que triplica la media estatal de parcialidad.

    Para la responsable sectorial, Desiré Martínez, la ratificación recientemente en el Congreso del artículo 189 de la OIT, es un gran paso. Pero realizar estudios como este, a pesar de ser un muestreo pequeño, también da la oportunidad de conocer mejor el sector e ir construyendo mejores herramientas para conseguir la igualdad de derechos con el resto de trabajadores y trabajadoras, y que la representación sindical, la negociación colectiva o la salud laboral dejen de ser una quimera.